Acompañame a explorar los encantos de la pintoresca localidad de Punta Lara.
El Palacio Piria: Más que una Construcción
¿Cómo llegar al Palacio Piria?
Esta casona está situada en el camino Almirante Brown entre 26 y 40 de Punta Lara, partido de Ensenada, provincia de Buenos Aires.
¿Quién construyó el Palacio Piria, quién fue su primer dueño?
El español Luis Castells y Sivilla fue un empresario, comerciante y banquero casado con Elisa Uriburu, hija del político Francisco Uriburu, fundador del pueblo de Villa Elisa, en honor a su hija.
Luis Castells y Sivilla se dedicó al negocio del campo en la Argentina, es así como en 1880 le compra a Jorge Bell la Estancia Punta Lara, con casi cinco mil hectáreas.
Su extensión comprendía tierras desde el Parque Pereyra hasta la costa del Río de la Plata.
¿Cuál es la historia del Palacio Piria?
En 1890 Castells, decide construir un enorme palacio en el lugar, pero fallece en 1897 y no puede avanzar con el proyecto.
De esta manera su hijo, Luis Castells Uriburu, continuó con propósito de su padre y diseñó una mansión única en medio del campo con playa propia, que se inauguró el 25 de mayo de 1910.
Desde entonces recibió en sus salones a destacadas figuras de la aristocracia como el Julio Argentino Roca, de esta forma termina contrayendo matrimonio 1912 con Josefina Eloísa Roca Funes, hija la hija del presidente.
Sin embargo en poco más de una década al entrar en bancarrota esta casona y su campo quedaron en manos de la Caja de Crédito Hipotecario.
¿Un prestigioso balneario en las playas del Palacio Piria ?
La mansión se convirtió, a mediados de 1925, en propiedad del empresario uruguayo Francisco Piria, quien recientemente había fundado el balneario de Piriápolis en su país natal.
Su nuevo dueño modernizó las instalaciones de la mansión y hasta logró conectarla con La Plata mediante una línea del ferrocarril.
¿Qué convertia en tan majestuosa esta mansión de Francisco Piria?
Este imponente palacio de estilo renacentista contaba con una fachada revestida en simil piedra, habitaciones revestidas en madera, tallada por artistas uruguayos.
Una sala de espejos adornada con espejos biselados.
Herrajes de bronce trabajados a mano. Tanto las puertas como los marcos trabajados en pinotea traída de España.
Una recepción central en semicírculo rodeada por suntuosas escaleras de mármol blanco traído de Carrara, puntillosos y coloridos
trabajos en venecitas.
Una doble escalinata de mármol en su entrada principal, que estaba sostenida por un total de 40 columnas.
Una capilla, que funcionó durante un corto periodo en el piso más alto.
Amplios jardines decorados con fuentes y estatuas que al pretender ser gran balneario los paisajistas planificaron convertir toda la orilla del río en un verdadero parque arbolado simétrico.
¿Cuál era el proyecto de Francisco Piria en Punta Lara?
Proyectando la urbanización completa de la ribera en todo el frente de su establecimiento.
Punta Lara había sido para el intento emprendedor y colonizador de Piria una especie de segunda Piriápolis más pequeña, a escala.
Sin embargo, su proyecto nunca se concretó, Francisco Piria cansado de la burocracia y de los impedimentos para concretar su balneario en las playas de Punta Lara, abandonó el lugar en 1930.
¿Qué sucedió con el Palacio Piria?
En 1947 los nietos de Piria donaron la mansión al Gobierno Provincial, con la intención de que los gobernadores la utilizaran como residencia. Pero esto nunca ocurrió.
En 1950 funcionó como el Instituto de Minoridad de la Provincia.
Entre 1950 y 1970 también albergó una pequeña colonia de vacaciones para niños huérfanos.
Durante la última década del siglo XX la propiedad fue donada al Municipio de Ensenada.
¿Fantasmas en el Palacio Piria?
Las versiones sobre situaciones paranormales son muchas pero muy variadas, quizás la sugestión de ver el sitio solitario rodeado de naturaleza lo provoca.
El sonido del viento en la construcción derruida, las aves que anidan en los huecos de los de la mamposteria y el paisaje tan particular de esta construcción permite hacer volar
la imaginación.
Sin embargo dos historias resuenan con más intensidad.
Los vecinos hablan de la mujer de blanco que aparece para echar a los intrusos, también de un jinete que custodia el ingreso al palacio.
En definitiva si son fantasmas o ilusión, ambas historias pregonan por la seguridad de quienes intentan ingresar al Palacio Piria
Tras el colapso de su estructura interior y el peligro en que se encuentra esta construcción es lo más acertado hacerles caso.
No te quedes con las ganas de saber más, te comparto uno de mis primeros videos cuando descubrí esta atrapante historia de idas y vueltas del Palacio Piria.
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